Algunos artistas que trabajan con papel se desafían para crear verdaderas obras solo con una hoja, otros en cambio, utilizan muchas piezas para crear mundos y escenarios complejos.
Ayumi Shibata, es una artista japonesa que utiliza muchas piezas superpuestas de papel cortado para crear entornos tridimensionales realmente impactantes. Después, les da vida a través de proyección de luz etérea sobre las filas del papel blanco, y su resultado es formidable.
La artista, manifestó que su interés por el papel surgió cuando se trasladó a Nueva York. Cuenta que tras una sesión de meditación abrió los ojos y vio una hermosa luz de colores que inundaba el piso a través de los vitrales. Este suceso le hizo recordar su época en la escuela primaria donde cortaban papel de color negro y pegaban papel celofán en la parte de atrás para hacer un vitral de papel.
Después de esto, Shibata volvió a su casa y realizó el proceso que había recordado. Desde entonces, crea piezas cada vez más grandes y complejas.
Estos mundos de papel son producto de la imaginación de la artista y combina estructuras arquitectónicas con belleza natural. Según palabras de Ayumi:
Me imagino lugares donde nosotros (los humanos) usamos la tecnología para restaurar el entorno natural; son destinos futuros donde la naturaleza, los humanos y todos los seres vivos coexisten y viven en armonía.
Pero la verdadera magia y belleza detrás de sus obras ocurre cuando Shibata agrega una fuente de luz a su arte. Ilumina las piezas por todos lados hasta que se siente segura que ha cobrado vida. Según la artista:
El papel representa Yin y el mundo material, mientras que el espacio recortado representa Yang y el mundo inmaterial. La luz simboliza el espíritu y la vida.
Creo que mis obras de arte son lugares donde se encuentran el mundo material y el mundo inmaterial, y contienen el mensaje de que todos estamos conectados.