El miedo, no lo enseñan. El amor y deseo están por así decirlo “entrenados” por el cine y la publicidad. La respuesta para el miedo es subjetiva, es intransferible.
Tal vez ahí es donde nos damos cuenta que nos gustan los libros de terror, porque es una forma abstracta de conocernos, de explorar esos sentimientos profundos soterrados en nuestro inconsciente. Un libro de terror lo leemos con todos los sentidos puestos sobre él.
Libros clásicos del terror que debes leer
Frankestein o el moderno Prometeo
Ya son un poco más de 200 años desde que Frankenstein, el moderno Prometeo de Mary Shelley fue presentado al mundo. Una novela que fundó la ciencia ficción en la literatura universal.
La primera edición impresa fue publicada el 1 de enero de 1818 sin el nombre de Shelley, esta fue criticada de manera mixta pero empezó a destacarse una vez comenzó a ser adaptada para el teatro unos años después.
16 de junio de 1816, muy poco tiempo después de la muerte de su primera hija, Mary Shelley despertó tras tener una pesadilla que cambió para siempre la historia de la literatura.
Drácula de Bram Stoker
Un demonio gótico de fin de siglo. Llegó a las librerías el 26 de mayo de 1897. Drácula es un sujeto que disfruta de generar pensamientos malignos en las personas, no soporta verse a sí mismo en un espejo, no come, no bebe y no soporta la música.
Drácula surgió de una pesadilla que tuvo su autor en 1890. Aquél día escribió en su diario:
Joven sale, ve unas chicas, una intenta besarle, no en los labios sino en la garganta. Viejo conde interfiere, cólera y furia diabólicas, este hombre me pertenece, lo quiero para mí.
El caso de Charles Dexter Ward
En una época muy lejana, el planeta tierra estaba poblado por otras razas. Sin embargo, fueron expulsadas por practicar magia negra. Ahora viven en el exterior y se disponen a volver. Este es el principio del mito de Cthulu, con el que H.P. Lovecraft le da un vuelco al terror gótico fantasmagórico.
Este libro es un relato policial que se ve influenciado por el ocultismo y fuerzas desconocidas.
La caída de la casa Usher
Un joven caballero visita a un amigo de la infancia, Roderick Usher, quien vive en compañía de su hermana. Usher sufre de una enfermedad huérfana, pero quien muere es otra persona…
¿Qué era —me detuve a pensar—, qué era lo que me desalentaba al contemplar la Casa Usher?
Esta es una historia clásica del brillante Edgar Allan Poe, el maestro del terror.
Siempre hemos vivido en el castillo
Shirley Jackson tuvo once gatos y cada uno tenía el nombre de un demonio. Murió joven, apenas con 48 años de edad, por un ataque al corazón. Se cree que este ataque ocurrió por los tratamientos que seguía para combatir sus enfermedades: neurosis, depresión, ansiedad y agorafobia.
En esta novela gótica, Jackson ilustra sus complejos claustrofóbicos. La historia cuenta de dos hermanas junto a su tía intentan que “todo siga igual” dentro de una familia donde todos mueren envenenados.
It/Eso
Esta es considerada una de las mejores novelas de terror de todos los tiempos. Finalizando la década de los 90, Stephen King creó una historia de un grupo de chicos, luego adultos que se enfrentan a un monstruo sin nombre al que le dicen “Eso”.
“Eso” se alimenta del miedo que provoca, es capaz de cambiar de forma, la más icónica: el payaso demoníaco Pennywise.
La semilla del diablo o El bebé de Rosemary
Esta obra literaria fue llevada al cine por el director Roman Polansky. Ruth Gordon ganó el Oscar por mejor actriz secundaria y Polansky fue nominado por la mejor adaptación del guion.
Esta obra abrió la puerta al culto satánico, pues luego de esta vendría el exorcista.
35 años después, Ira Levin dijo sentirse culpable por escribirla y dijo:
Hay toda una generación que ha sido expuesta y tiene más fe en Satanás. Yo no creo en Satanás. Y pienso que el fundamentalismo que tenemos no sería tan fuerte de no haber tantos de estos libros.
